MASAJE DEPORTIVO
El masaje deportivo es una terapia especializada que se enfoca en preparar y recuperar los tejidos musculares, fomentando la circulación sanguínea y linfática para acelerar la recuperación y prevenir lesiones. Empleando técnicas manuales y complementarias como ventosas y vendajes neuromusculares, esta terapia mejora la flexibilidad, reduce la rigidez muscular y promueve el bienestar físico. Su objetivo es prevenir lesiones y acelerar la recuperación en caso de sufrirlas, eliminando toxinas y mejorando la nutrición de los tejidos.
El masaje deportivo se vale de diversas técnicas
Estimula la circulación, alivia el dolor muscular, quita adherencias de cicatrices.
Vendaje neuromuscular que activa o relaja músculos, mejora la elasticidad de ligamentos y promueve la circulación
Presión, masaje y amasamiento
Nudos sensibles y dolorosos en los músculos
Manipulaciones, técnicas articulares
A quién va dirigido
Para todo tipo de deportistas: profesionales, que realicen actividad física de forma regular o esporádica.
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Indicada para deportes de montaña, como escalada, alpinismo, carreras y bici.
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También para deportes indoor y outdoor como baloncesto, skate, padel
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Puede abordar muchas lesiones osteopáticas, como torceduras de tobillo, esguinces, codo de tenista o golfista
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Trabaja con problemas de rodilla relacionados con la musculatura de isquiotibiales, cuádriceps, abductores o cintilla iliotibial, así como sus ligamentos, tendones y meniscos.
Beneficios
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Ayuda en la prevención de lesiones deportivas musculares.
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Prepara y calienta los músculos antes del entrenamiento o competición.
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Estimula la circulación en los músculos.
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Descarga, acondiciona y recupera los músculos después del ejercicio.
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Proporciona relajación física y psicológica, aliviando tensiones.
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Estimula los músculos fatigados.
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Facilita la recuperación de lesiones osteopáticas.
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Ayuda a reducir el dolor muscular y los espasmos causados por la actividad deportiva.